USOS DE CARBÓN DE LOS QUE NO TENÍAS NI IDEA

A pesar de que muchas personas suelen asociarlo únicamente con las fiestas y la diversión, el carbón no sólo sirve para pintar las caras de niños, prender fuego y ser regalado a los más traviesos durante la Navidad en España. Está bien: en todas partes del planeta existen artistas capaces de crear verdaderas obras de arte con su ayuda, pero la verdad es que esto tampoco cierra la lista de sus posibles empleos.

Para entenderlo, vale la pena darse cuenta de que el carbón no necesariamente tiene que tener forma de pequeñas piedras. Su versión activada, procesada y vendida en forma de comprimidos, puede sernos muy útil también para otras cosas, y de manera considerable mejorar nuestro aspecto y favorecer la salud. Si quieres conocer sus otros usos, este artículo está hecho para ti.

¿Cuántas veces te has quedado con las ganas de blanquearte los dientes por no poder permitirte dicho tratamiento? Infortunadamente, las sesiones profesionales de blanqueo dental suelen ser largas, molestas y costosas, por lo cual a muchas personas les es bastante difícil cumplir sus sueños sobre una sonrisa de Hollywood. Con la ayuda de carbón activado puedes conseguirlo sin preocuparte por la condición del esmalte que cubre tus dientes.

Para preparar un dentrífico blanqueante, machaca unas pastillas de carbón activado y mezcla el polvo con unas gotas de agua o un poquito de aceite de coco. Con tu cepillo aplica la papilla sobre tus dientes y masajéalos un momento para que llegue a cubrirlos bien. Mantén la mezcla en la boca durante 3 minutos, enjuaga y lávate los dientes con una pasta que sueles usar todos los días. Los resultados van a poder notarse al instante.

Otros problemas con los que el carbón se las apaña a la perfección, son los que tienen que ver con la digestión. Ya que es una sustancia atóxica, barata y fácil de obtener, que además posee unas propiedades antibacteriales, antiflamatorias y purificantes, sirve de maravilla para detener diarreas, calmar flatulencias y curar la indigestión. Cabe destacar que su uso interno es completamente seguro.

Si sufres de alguna de las condiciones que tienen que ver con el funcionamiento de tu aparato digestivo, tomar una o dos pastillas de carbón activo puede proporcionarte ayuda sin poner el riesgo el estado general de tu salud. El carbón activado es un remedio excelente que puedes tomar como sustituto de medicamentos caros y hechos a base de componentes más nocivos.

Para tu piel…

Gracias a sus propiedades antibacteriales y purificantes, el mismo carbón puede ser utilizado como componente activo para limpiar la cutis y librarla de toxinas. Por ende, funciona genial como exfoliante, cierra los poros y los limpia de todo tipo de granitos, espinillas, etc. Es también muy eficiente: ¡con un sólo blíster de pastillas (o un par de cápsulas) de carbón vas a poder elaborar varias mascarillas!

Para preparar una mascarilla, machaca entre 2 y 4 pastillas de carbón activado y mézclalas con unas gotas de agua, yogur natural o aceite de coco. Intenta hacer de estos dos ingredientes una papilla que se mantenga sobre tu rostro. Aplica la mascarilla sobre la cara y deja que actúe entre 5 y 15 minutos -dependiendo del tipo de cutis y el estado de las imperfecciones- antes de enjuagarla con agua.